(Por José Luis Reybaud).- Venian de ser subcampeonas dos veces. Y a esta nueva modalidad del Torneo Nacional de Clubes de Hockey Pista llegaban como candidatas. Pero no tuvieron un gran torneo. En lo físico no estaban bien y eso se notó en varios partidos. Pese a todo, los encuentros no los perdieron por goleada. Es más, empezaron ganando la mayoría de los mismos.
También tuvieron jugadoras que se acoplaron al grupo a días de llegar de viaje. Pero lo que más tocó a las chicas fue el problema que tuvo una de sus jugadoras, Fabrina D’Benedetto. “Fabri” tuvo un grave accidente de trabajo, quemándose parte del cuerpo. Hoy está mejor, pese a que la pasó muy mal, y por eso la chicas vivían y sentián de manera muy especial cada partido. Pensando en su recuperación y deseándol lo mejor. Las peques “santas” le hicieron una bandera, pero faltaba un triunfo para que la dedicatoria sea completa.
La victoria se produjo frente a un gran rival como Chalten. Costo sí, pero lo que cuesta vale doble y en este caso valió mucho más.
La definición fue por penales australianos, luego de empatar 3 a 3. La garra santa se vio, cuando perdían 2 a 1. Y luego la unión de ellas, en la definición por penales. Fue 2 a 0 gracias a la gran actuación de Bárbara González Colombo en el arco y las definiciones de Andrea Scaglia y Florencia Sfeir.
Este triunfo fue muy festejado y obviamente se consiguió para dedicárselo a Fabrina. Y de esa manera alegrarle esa lenta recuperación que demandará 2 meses. “Un lujo fue participar de este torneo. Era poner 1000 por 1000 en cada partido, porque así lo demandaba el nivel del torneo. Estamos contentas de haber podido lograr, aunque sea,un tercer puesto. Se vive mucho, cuando se juega con pasión las emociones surgen, hay llantos y alegrías” digo con los ojos llorosos de emoción, Mariana Danesi, técnica de San Esteban.
Al mismo tiempo “Pochi” recordó lo especial que fue conseguir el tercer puesto: “La bandera de dedicatoria la hicieron las chicas de las categorías inferiores, sintiendo que esto es una familia, y que Fabrina es una más de ellas, más allá que sea de primera. Fabrina está internada en Buenos Aires, en cuidados intensivos, y el sábado nos llamó, y nos retó por haber errado un penal (risas emocionadas). Estamos locas y es una locura linda. Todos esto es para ella, le debíamos un triunfo y por fin lo conseguimos”, expresó Danesi.
San Esteban, tercer club del país en damas, y no es un dato menor. Ahora espera con los brazos abiertos y mucho corazón la recuperación de una integrante más de la familia santa.